viernes, 26 de febrero de 2010

¿Por qué estás tan tieso?


Para corregir los defectos, hay que empezar primero
por corregir las rigideces.

Thérèse Bertherat

Anda y ponle perlán
a ese capote armidonao, ¡malaje!



No hay comentarios:

Publicar un comentario